viernes, 4 de marzo de 2016

Amenazas por campaña para presionar la investigación del asesinato de Humberto Peña Taylor.


De acuerdo con el informe sobre la situación de derechos humanos en Colombia, realizado por Human Rights Watch (1996), el asesinato, parece haber contado con la connivencia de personal de seguridad de la universidad. La referencia se encuentra en: Human Rights Watch World Report 1996 - Colombia, 1 January 1996. Esta noticia se tomó el 1 Marzo de 1996, del sitio:


http://www.refworld.org/cgi-bin/texis/vtx/rwmain?page=country&category=&publisher=HRW&type=&coi=COL&rid=&docid=3ae6a8a24&skip=0

"Humberto Peña Taylor, a law student at Bogotá's National University who took part in a free legal clinic for poor Colombians, was hunted down and killed by two armed men who entered the university campus on June 15, apparently with the collusion of university security personnel. When fellow law student Gabriel Riaño Prieto, a member of a university human rights group, later led a campaign to press for an investigation of Peña's killing, he received telephone death threats."

He aquí una burda traducción: 

Peña Taylor, un estudiante de Derecho en la Universidad Nacional de Bogotá, quien participó en una clínica legal gratuita para los colombianos pobres, fue perseguido y asesinado por dos hombres armados que entraron en el campus de la universidad el 15 de junio, al parecer con la connivencia de personal de seguridad de la universidad. Cuando compañeros de estudiante del derecho Gabriel Riaño Prieto, miembro de un grupo universitario de derechos humanos, encabezó más tarde una campaña para presionar por una investigación del asesinato de Peña, recibió amenazas de muerte por teléfono.

La memoria es un campo de batalla

Seis años después del asesinato de Humberto (2001), se presentaron los hechos donde un murió un patrullero de la policía, en los predios de la Universidad Nacional. Sin hacer investigaciones ni corroborar los testimonios acerca de lo ocurrido, www.eltiempo.com publicó una noticia en la que se hace referencia a unas supuestas "milicias" urbanas denominadas "Humberto Peña Taylor". 


¿Hasta dónde es cierto lo que escribieron aquí? ¿A que obedece la referencia de este artículo, sobre Humberto Peña Taylor? ¿Qué impacto tiene esta referencia en el imaginario colectivo de los estudiantes de la Universidad Nacional?¿Tiene algo que ver con la recompensa? ¿Quién dio el testimonio?¿es alguna persona vinculada directa o indirectamente a la Nacho?¿por qué relacionan su nombre con actos violentos en el contexto de la protesta de la Nacho?

ME BAJÉ UN TOMBO

Recuparado el 6 de febrero de 2001 en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-656646

Publicación: eltiempo.com; Sección: Bogotá; Fecha de publicación: 5 de febrero de 2001.

Huy!, parcero, me bajé un tombo , dijo el profesor Jairo Augusto González a sus compañeros de revuelta, al referirse a la muerte del patrullero Mauricio Soto en los predios de la Universidad Nacional.
Huy!, parcero, me bajé un tombo , dijo el profesor Jairo Augusto González a sus compañeros de revuelta, al referirse a la muerte del patrullero Mauricio Soto en los predios de la Universidad Nacional.

Según el expediente, el profesor González le contó a una de las jóvenes, quien atestiguó en su contra ante la Fiscalía, cómo lanzó, el 30 de agosto del año pasado, la papa explosiva contra el patrullero de la Policía durante una violenta protesta contra la visita al país del presidente de Estados Unidos, Bill Clinton.

Pille: yo estaba ahí detrás y el hombre me dio la espalda y yo le pegué. Le di con una cinco cinco en la cabeza. - Si se hubieran pillado cómo le volé el casco- , repitió la testigo las palabras del profesor.

La mujer dijo que después, como señal de triunfo, los compañeros chocaron las manos.

Este y otros testimonios, incluyendo los del rector y de estudiantes del colegio donde trabajaba González Moreno, y el de sus compañeros de universidad, tiene como prueba la Fiscalía para mantener tras las rejas al profesor.

González, capturado el 9 de septiembre en su apartamento de la calle 173 con carrera 20, está hoy recluido en la cárcel Modelo, sindicado del homicidio del patrullero.

En su indagatoria, González dijo a la Fiscalía que asistía regularmente a la Universidad a comprar drogas. Sin embargo, tres de sus amigos contaron a los investigadores que el profesor era reconocido en la Nacional como El Guerrero y que, según el expediente, pertenecía a unas llamadas milicias Humberto Peña Taylor.

La tarde del 30 de agosto, cuando se confirmó la muerte del patrullero Soto, un jíbaro identificado como El Sardino , alertó a González. Le dijo: Parce, tenemos que abrirnos, porque esto se puso caliente . En ese momento, el profesor se dio a la fuga y fue grabado por los noticieros de televisión.

Otro testigo, que dijo ser ex miliciano, explicó a la Fiscalía que González era el único encargado de utilizar las cinco cinco (artefactos explosivos especiales, utilizados por los revoltosos) y podían identificarlo por las cicatrices que tiene en la cara.

Pero la prueba contundente que tiene la Fiscalía contra González es el testimonio del mismo rector del colegio de Santandersito, en Cundinamarca. González argumentó en su defensa que el 30 de agosto había estado dictando clases y ocupado con las calificaciones, hasta después del mediodía, y que solo llegó a Bogotá en horas de la tarde.

El rector, Luis Eduardo Barbosa Díaz, declaró que el día del homicidio el docente solicitó permiso para ausentarse después de las 10:45 a.m. La versión fue ratificada por alumnas del establecimiento.

Según la Fiscalía, directivas del plantel explicaron que las notas fueron entregadas por González a sus alumnos dos días antes de la muerte de Soto, el 28 y no el 30 de agosto.

Se conoció, de otro lado, que la Policía suspendió la entrega de los 30 millones de pesos que ofreció de recompensa por la información que permitió la captura del profesor. Aunque González sigue detenido, la Policía dijo, sin embargo, que era necesario esperar que el proceso concluyera.
Referencia del Centro de Investigación y Educación Popular (Cinep) sobre el Asesinato de Humberto Peña Taylor

15-Jun-95: En BOGOTÁ, D. C., paramilitares ejecutaron al estudiante de derecho y líder estudiantil, HUMBERTO PEÑA TAYLOR. El hecho ocurrió en la cafetería de dicha facultad.


Centro de Investigación y Educación Popular (Cinep). Paramilitarismo de Estado en Colombia 1988-2003, Deuda con la Humanidad. Acontecimientos del Año 1995. Pag. 137. 
El viento trae el eco tardío de una voz que se ahogó en el silencio

Dos décadas después que la noticia hubiese llegado a latitudes inesperadas, encuentro en las memorias perdidas de una vieja computadora, este pequeño documento. Lo re-publico aquí textualmente para invitar a quienes siguen el blog a que contribuyan con archivos, noticias, referencias bibliográficas, periodísticas o literarias, e incluso testimonios judiciales, con el fin de no dejar en el olvido ni en la impunidad, el homidio de Humberto.

ORGANIZAR! para el anarquismo la lucha de clases
Número 44; £ 1.00 (Gratis para los reclusos) Otoño / Invierno 1996

Recuperado el 10 de diciembre de 2010: 7:44 a.m., de: http://www.afed.org.uk/org/issue44/colombia.html


INTERNACIONAL

Humberto Peña Taylor

En mayo de 1995, Humberto Peña Taylor fue asesinado en el campus de la Universidad Nacional (Universidad Nacional) en Bogotá, Colombia.

Humberto era un miembro de un colectivo libertario, que se ha dedicado a la lucha contra las autoridades, y en particular contra la privatización de la educación y la creación de neo-liberalismo. Él era un firme defensor de la acción directa, y puso su fe en la capacidad de la gente común para liberarse. Era conocido como un orador poderoso y un activista comprometido que estaba dispuesto a hacer frente a la opresión en todo lo necesario. En el momento de su muerte estaba estudiando Derecho.

En los últimos años, más de 200 estudiantes y profesores han sido asesinados en Colombia por su oposición al gobierno y sus políticas. En muchos de estos casos, los agentes de seguridad del Estado han sido implicados en la muerte. Nadie ha sido acusado de la muerte de Humberto, y hay diversas especulaciones acerca de quién podría haber sido responsable. Lo que está claro es que estos asesinos operan con total impunidad.

En este momento hay muchas fuerzas de la opresión de operación en Colombia, desde el gobierno, a los cárteles de la droga, pasando por los gustos de la Administración de Drogas de los EE.UU. de Aplicación. En la cara de la represión generalizada perpetrada por ellos mismos que es el crédito inmenso de los libertarios, gente como Humberto, que seguir luchando por la libertad, y la lucha contra la represión.

El ACF gustaría enviar un mensaje de apoyo a nuestros camaradas en Colombia y les deseamos la última victoria en nuestra lucha. También nos gustaría enviar nuestras condolencias a los familiares y amigos de Humberto Peña (a Taylor, ya todos aquellos que han sufrido pérdidas similares en Colombia. Sabemos que la lucha continuará!